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Incutex pisó fuerte en el Foro Mundial de Desarrollo Económico Local

 

5 días, 40 sesiones en vivo y más de 200 speakers de todo el mundo. Juan Santiago y Walter Abrigo formaron parte de los diferentes paneles propuestos en esta V edición del Foro Mundial. Un repaso de los mejores momentos y conceptos expuestos en sus disertaciones.

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El V Foro Mundial de Desarrollo Económico Local (WFLED) se llevó a cabo entre el 26 de mayo y el 1 de junio de 2021, con más de 40 sesiones en vivo y más de 200 disertantes de todo el mundo, entre los cuales fueron convocados Juan Santiago, presidente de Incutex y Santex, y Walter Abrigo, Director General de ambas empresas. 

La Agencia para el Desarrollo Económico (Adec) y la Municipalidad de la capital provincial fueron los anfitriones de este encuentro organizado por un comité internacional bajo una iniciativa de las Naciones Unidas.

Además, en el marco de este Foro Mundial, tuvo lugar también el Primer Foro Empresarial, bajo el lema: “Claves para el desarrollo económico local: la mirada de los empresarios”, espacio cuyo objetivo fue generar un ámbito para que el empresario pueda expresar su visión y las necesidades para potenciar el desarrollo económico. 

Empleabilidad y empresas sustentables, desde la mirada de Juan Santiago

El presidente de Incutex, Juan Santiago, disertó en el segundo bloque del Foro Empresarial, que giró en torno al eje “Generando más empleo para reducir desigualdades y pobreza: La creación de nuevas empresas sustentables en los territorios”. “Yo siempre he tenido la idea de que la responsabilidad viene de la posibilidad de cambiar algo, y si tenés esa posibilidad, inmediatamente sos responsable de accionar sobre eso”, comenzó diciendo Santiago, tras la presentación de Luciano Nicora, moderador del bloque.

“Nosotros tenemos una compañía donde hace tiempo que venimos desarrollando diferentes iniciativas para mejorar la empleabilidad, a través de programas que hemos desarrollado individualmente o a través de otras instituciones”, aseguró Santiago y explicó que “al ser una empresa de tecnología y tener fondos de inversión en tecnología, vemos la tecnología como ese vehículo transformador. Entonces, es a través de cómo nosotros utilizamos la tecnología con las personas y el talento alrededor de esos desarrollos, que buscamos influenciar el mundo”.

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En este sentido, Santiago hizo referencia a la certificación obtenida por Santex como empresa B e indicó: “Entendimos que el sistema B nos daba el marco en el cual nosotros podríamos englobar todas nuestras iniciativas, todos estos programas que teníamos y los podíamos medir. Como muchos empresarios saben, lo que no se mide no se puede mejorar. Entonces, nosotros estamos en un constante proceso evolutivo”, aseguró Santiago.

“Para nosotros, el poder ser una compañía globalizada y poder deployar capital en inversiones en emprendedores que pueden hacer una diferencia en el mundo, de ahí es donde nace esa responsabilidad que la hemos abrazado y estamos dispuestos a desarrollar nuestro potencial al servicio de la mejora de estas iniciativas”, precisó Santiago. 

En esta misma línea, sostuvo que “cada cosa en la que vamos a invertir, no pensamos solamente en lo que nos pueda ser funcional, sino también en que con esa inversión queremos generar impacto ambiental y social”.

Walter Abrigo y el rol de la tecnología para un aprendizaje permanente

En el quinto y último día del Foro Mundial de Desarrollo Económico Local, Walter Abrigo, director general de Incutex, fue parte del panel reunido bajo la temática: "Sistemas locales de formación para un aprendizaje permanente", entre los que se encontraban también Hugo Juri, rector de la Universidad Nacional de Córdoba; Andrew Cummings, académico de la UCA Nicaragua y FLACSO El Salvador;  Jelena Janevska, de la Red de Asociaciones de Autoridades Locales del Sudeste de Europa, entre otros referentes internacionales.

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Abrigo dio inicio a su disertación mostrando un informe de la BWC que muestra el impacto que va a tener la automatización en el desempleo. “Lo importante de este estudio, lo que nos muestra es que ese 30%, en realidad es la media. Cuando analizamos el nivel de educación, la realidad es que el impacto en los trabajos, si tu nivel de educación es bajo, va a ser del 45%. Cuanto menor sea tu nivel de educación, más riesgo corres de que tu empleo se pierda”, sentenció. 

“Hay un informe de la UNESCO que nos muestra que actualmente hay 260 millones de niños que no tienen acceso a la educación básica y que para el 2030, para que estos niños accedan a la educación, vamos a necesitar 69 millones de profesores. Pero, podemos aprovechar tecnologías convergentes que tenemos al alcance de nuestra mano hoy en latinoamérica y que ofrecen un sinfín de soluciones”. 

Para ejemplificar esto, Abrigo se valió de dos experiencias. La primera, llevada a cabo por el fundador de Media Lab, Nicholas Negroponte, en 2012, quien envió “tabletas con cargadores alimentados con energía solar, a aldeas de Etiopía, a niños analfabetos; y, la segunda, llevada a cabo por una organización global que propuso un premio de 15 millones de dólares para los desarrolladores de software a nivel mundial que logren hacer una app de software libre basado en android para que cualquier niño pueda aprender por sí mismo, sólo con la ayuda de la tableta, en Tanzania.

En este sentido, el Director General de Incutex hizo hincapié en la enorme oportunidad que esta tecnología representa. “Actualmente se fabrican mil millones de dispositivos por año con software Android, tenemos la posibilidad de que esa aplicación, que es de software libre, esté preinstalada en todas las tabletas y móviles, ya que no requiere internet”.

“¿Qué podemos hacer hoy? Formar a esos niños que en el 2030 van a estar en el mercado laboral, que accedan ya. A las organizaciones, a la academia, poner foco en el desarrollo de habilidades que son menos susceptibles a ser automatizadas: en lugar de ejercicios repetitivos, enseñar a resolver problemas no predecibles; en lugar de aprender datos de memoria, a comprender emociones; en lugar de cumplir órdenes, a desarrollar pensamiento crítico”, aseguró Abrigo.

“Tenemos tecnología al alcance de la mano, disponible, pero tenemos que generar en que esas posibilidades tecnologías que ya están al alcance de la mano como enseñarlas, cómo desarrollarlas en las personas y en las organizaciones".